Di no a los andamios de aluminio sin homologar
Los andamios de aluminio deben seguir un proceso para convertirse en andamios homologados y de esta manera poder trabajar con ellos sin problemas. De hecho, son algunas las ocasiones en las que las empresas constructoras usan andamios sin tener la correcta homologación, lo que genera una clara situación de riesgo en materia de seguridad, especialmente para el trabajador.
¿Por qué deben homologarse los andamios de aluminio?
Al hablar de la homologación de un andamio no es solo que cumpla con los criterios técnicos de seguridad reflejados en un papel, sino que debe ser llevado a la práctica para elegir correctamente la plataforma con la que vamos a trabajar. De hecho, en estos trabajos de altura los riesgos son altos si no se trabajan con los materiales adecuados, y por ese motivo es muy importante elegir siempre los andamios de aluminio que estén homologados.
Por tanto, minimizar estos riesgos es fundamental porque al final el ahorro económico de no homologarlo no compensa con los enormes riesgos de seguridad que conlleva. De esta forma, lo correcto es que estos elementos queden homologados en función de su estructura. Así, destaca la norma que hace una referencia directa con la adecuación UNE EN 1004 y el Real Decreto 2177/2004 por el que se regulan las disposiciones mínimas para la seguridad y la salud de los trabajadores en sus respectivos equipos de trabajo.
Y a esto hay que sumarle la normativa local y la resolución de la Dirección General de Trabajo dentro del sector de la construcción, así como los criterios técnicos oficiales para las torres de trabajo móviles en cuanto a normas constructivas (NTP 695), montaje y utilización (NTP 696); y a las torres de acceso en cuanto a normas constructivas (NTP 734) y montaje y utilización (NTP 735).
En definitiva, homologar los andamios de aluminio es fundamental, tal y como hacemos en ACS Spain, donde todos nuestros andamios están homologados según la ley vigente.